No voy a esperar hasta el 2023 para pasarla bien
Otro sueño. Era un hámster con rueda de plata, túneles arcoíris, sustrato para dos meses y trece días pero con mi hábitat escondido en la alacena debajo de las escaleras, con una singular croqueta en el comedor y tres gotas de agua verde en el bebedor.
¿Sabes cómo sobreviví? Desde otra ventanita, veía Toda esta ciudad. Me paraba sobre mis patitas traseras y olfateaba el brillo, la calidez de la ciudad del sol. Sol que vuelve ceniza a quien se acerque, que solo en la distancia encontré la manera de darle todo mi amor, porque no podía verla directo a los ojos; algo hermoso pero para extrañar.
El rescate fue lo mejor. Me encontré a mí mismo y me guardé en la bolsita de la camisa que está pegada al corazón. Y ahora aunque encuentre más ventanitas en restaurantes o en fiestas, ya no volteo.
publicado el 1 de enero de 2022
Comentarios
Publicar un comentario